El futuro → Libre ←

Allí estaba yo, parado en la entrada de la sala de los árboles. Aún no era mi momento, aún no estaba listo para solicitar la audiencia,  Oscuro y Luz aún aguardaban mi audiencia. Estaba nervioso, no sabía que elemento elegir, no era algo fácil, una vez que lo hacía, no había marcha atrás. Me quedé observando las marcas sobre las puertas, pensando en todas las historias de mi abuelo, pensando en muchas cosas en sí.

No sabría decir cuanto tiempo estuve allí, pero en un momento me empezaron a doler los pies, por lo que me senté en el suelo, apoyando la espalda contra la pared. Estaba nervioso, un poco ansioso ¿Donde iba a ir mi esencia? ¿Sería un miembro de la oscuridad? ¿O de la luz?  Mi cabeza daba vueltas con muchas preguntas, preguntas que no podrían ser respondidas mas que por mi mismo.

La luz del día se estaba yendo, la tarde comenzaba a caer y la oscuridad se adueñaba del lugar, era hora de ir a mi cuarto. Respiré profundo y luego suspiré, recolecté todas las fuerzas que tenía para ganarle a la comodidad de estar tendido en el suelo y me puse de pié.

Al comenzar a caminar, sentí unos pasos, sigilosos, pero alguien se acercaba, miré curioso entre la penumbra -¿Hola? dije para que aquella persona supiera que no estaba sola.

Se estaba haciendo tarde y aun andaba rondando el lugar, paseando por aquí y por allá era lo que mejor la distraía durante el día. La sala de arboles le traía recuerdos de cuando opto por uno de los grupos, no tuvo que pensarlo demasiado cuando tomo la decisión que vino casi como un reflejo al momento que le hicieron la propuesta.

Al parecer alguien se encontraba en el lugar, comenzó a caminar sigilosa hasta encontrar a la persona y sonrió cuando este hablo al sentir su presencia - Hola - Se acerco al muchacho con la cabeza ladeada y una sonrisa - Parece que estas pensando mucho - Soltó una pequeña carcajada - Tus suspiros llamaron mi atención - Se enderezo y levanto los hombros - Oh disculpa, aun no me presento - Estiro la mano para dejarla frente al muchacho - Mi nombre es Kelly, encantada de conocerte.

En el último tiempo le agradaba pasearse por el templo investigando o solo para hacer vida social con una que otra persona que se le cruzara, sus entrenamientos los realizaba temprano por las mañanas y en la noche cuando la mayoría estuviese descansando.

Una sonrisa me respondió con una voz cálida, se dejó ver la figura de una muchacha. La observé de arriba abajo y por más extraño que pareciera, me resultaba familiar, pero no ella, sino mas bien, su esencia, como si la conociera de una vida pasada o algo por el estilo.

Se presentó y yo hice lo mismo, estreche mi mano con la suya -Eh, Luciano, un gusto. dije mientras llevaba la otra mano por detrás de mi nuca, no sabía que estaba haciendo tanto ruido. -Disculpa, no me di cuenta de los suspiros solía ser interrumpido en los momentos en que leía, sabía que muchos ruidos pueden ser molestos para ciertas personas.

Estaba un tanto nervioso, si bien me gustaba ser social y cordial con las personas, la verdad era que me ponía nervioso interactuar con otro ser humano-Yo ya me iba. hice una pausa -Digo, por si necesitabas el lugar. Fruncí el ceño y miré al suelo inmediatamente por mi respuesta, no estábamos hablando de un baño publico, en ese momento me sonrojé y apunté para irme por el pasillo en el que ella había llegado.

Llevo las manos a los bolsillos de sus pantalones, estaba relajada como casi todos los días cuando se ponía a recorrer el templo y el muchacho parecía algo nervioso, eso le llamo la atención.

- No, no te preocupes - Miro para un costado - Siempre ando rondando estos lugares - Miro hacia el otro costado - Mas cuando comienza a atardecer, me parece mas curioso en ese horario - Soltó una carcajada simpática - Te acompaño si quieres, no tengo mucho que hacer y pareciera como si necesitaras hablar de algo - Se acerco a mirarlo a los ojos - Quizás pueda ayudarte si me dejas - Se alejo para ponerse a un costado del muchacho y le dio un codazo suave en el brazo, como para llamar su atención y se quedo esperando la respuesta de este.

Entre la mayoría de sus encuentros con distintas personas en el templo este muchacho comenzaba a llamar su atención, algo en su instinto le decía que debía conocerlo y era bastante extraño aquello. Como siempre no pensaba demasiado en las cosas que sentía, sólo las daba por hechas y seguía la corriente de los hechos que fuesen a suceder.

La muchacha parecía amable, respiré profundo y entre en otra fase. -Disculpa, es que me agarraste desprevenido. No tengo problemas en que me acompañes, aunque sinceramente, no se hacia donde iba. Miré al suelo, justamente era eso, no se hacia donde iba, ni que estaba haciendo en aquel lugar.

La miré a los ojos y fruncí el ceño -Tampoco busco agobiarte Kelly, son estas dudas existenciales que nos agarran de vez en cuando no se por que, pero mi boca solo emitía palabras cuando mi mente le pedía que se calle -Es que, yo sigo sin definir que elemento escoger y la ascensión del árbol, dios, le tengo terror a eso.

Había leído mucho de los árboles, no conocía en persona ni al Sr Luz, ni al Sr Oscuro, sabía que ellos son los que están para la primera guía, pero ¿Y si no soy lo que ellos quieren? Sabía que en toda la historia, solo a una persona la dejaron fuera de los grupos, pero no se más del asunto. Mi cabeza comenzó a divagar de nuevo, por lo que pestañee un par de veces lo más rápido y fuerte posible para poder aclararme de nuevo, y así, comenzar a caminar con mi nueva acompañante.

Miraba divertida las expresiones del muchacho que se notaba agobiado, cosa que para ella era algo extraño y le llamaba la atención como la gente trataba de tomar decisiones de una forma lógica sin tomar en cuenta muchas veces su propio instinto.

- A veces sólo hay que dejarse llevar cuando no sabes a dónde quieres ir - Levanto las cejas esbozando una sonrisa - No te preocupes, no me agobias para nada - Le guiñó un ojo tratando de que el muchacho se relajase - No lo sé, yo no me sentí así cuando escogí uno - Encogió los hombros en señal de pregunta - Bueno esta claro que no es igual para todos, pero yo sinceramente no lo pensé demasiado, soy una persona que se deja llevar un poco mas por los instintos que por la lógica - Puso sus manos en su espalda entrelazando sus dedos para comenzar a caminar hacia algún lado con el muchacho - Además siempre tuve mas afinidad con el elemento de la tierra que con los demás - Comenzó a mover su cabeza divertida llevando el mismo ritmo que el de los pasos que daba - Quizás aun no es tiempo para que elijas y estas estresándote solo por todo este asunto - Sonrió amable.

Las palabras de Kelly hicieron que entrase mas en confianza con ella y dejara mis nervios de lado. La escuché atentamente, tal vez tendría razón, me hacía falta dejarme llevar un poco mas, tal vez no es mi momento aún de elegir un elemento, pero ¿Cuando sería? -Es que, hay tanta gente mas joven que yo que tiene su elemento definido. mire al suelo nuevamente -Puede que tengas razón, soy una persona de amplios conocimientos, pero poca experiencia, las cosas que sé son basadas en logros de escritores. Dije un tanto melancólico.

Al parecer, mi estado de animo no era el mejor, pero como no quería contagiar a Kelly, cambié de tema. -¿Hace cuanto tiempo estas aquí? No te recuerdo, pero al mismo tiempo me suenas familiar.Mi tono de voz cambió, quería demostrarle quien era yo en verdad y no esa persona que piensa más de lo que debe... Que también soy así, pero no viene al caso.

Comenzamos a caminar por el pasillo, hermoso de techo alto, lleno de estatuas o también "guardianes del templo" todo decorado por demás, al mejor estilo Claroscuro. La luz del día se iba apagando lentamente, los adeptos del lado de la oscuridad recobraban mas fuerzas por la noche y los de la luz por el día ¿Que será de mí?

La oscuridad ya se hacia sentir en sus entrañas a cada paso que daba se sentía un poco mas vigorosa y con ganas de realizar alguna actividad que la divirtiera, aunque caminar junto al muchacho la estaba entreteniendo bastante. La energía comenzaba a fluir de alguna forma en su cuerpo y comenzó a jugar moviendo una pequeña bola de tierra que estaba en el suelo frente a ellos, cada vez que daban un paso ella movía la bolita de tierra.

- No todos somos iguales y creo que no existe una edad especifica para definir con que elemento te llevas mejor - Cruzo los brazos frente a su pecho - Quizás esa experiencia leída debas llevarla a la practica y luego entender con que elemento te defines mejor - Comenzó a mover la cabeza en modo de afirmar su comentario - No todas las respuestas están en los libros - Se tomo el mentón con la mano derecha y escucho la pregunta que el muchacho le hacia - Hace tres años y medio que estoy aquí en el templo - Llevo sus manos a los bolsillos de su pantalón - Y hace dos años realice la ascensión, no me tomo mucho tiempo saber a donde pertenecía en realidad y ahora sigo aprendiendo sobre el elemento al cual pertenezco - Miro curiosa la reacción del muchacho ante su respuesta - Quizás me has visto practicando en algún lado, siempre estoy tratando de perfeccionar mis posturas o ayudando a uno que otro integrante del templo o en alguna clase.

La muchacha comenzó a jugar con la tierra, no me había falta preguntarle a que rango y taza pertenecía, la oscuridad de sentaba muy bien. Al pasar por uno de los candelabros que nos iluminaba, tomé con mi mano la llama y la lleve conmigo. -Leí sobre todos los elementos, y sus fusiones. ¿Sabias que si un adepto de la tierra y otro del fuego se juntan, forman el magma? Cerré la mano y la llama se apagó.

-Puedo controlar los cuatro elementos, pero no puedo dominarlos. Me gustan mucho manejar los cuatro como para decidirme con uno solo, aunque, mi poder no se asemeja en nada en lo que podía llegar a ser si hago la ascensión. Cuando terminé de decir esto, levante unos centímetros la bola de tierra con la que Kelly jugaba. -No puedo lanzarla, pero si moverla. dije mirando fijo a lo que ahora, era una esfera de tierra perfecto.

-Algo que nunca podré hacer si no elijo un elemento, son las fusiones. Por más que controle los cuatro elementos, no puedo combinar nada entre ellos, sólo puedo concentrarme de a uno a la vez. Eso me hizo recordar la clase abierta de fusión que se iba a dar. -La Srita McKing ya está en el templo, dicen que es la mejor explicando la fusión de elementos, tenia planeado ir ¿Que me dices? Le dije con una sonrisa.

Pudo notar como el muchacho manipulaba una llama de los candelabros que iluminaban el lugar y sonrió divertida - Si, lo sé, lo he intentado pero no he podido encontrar a algún adepto de fuego que me siga el ritmo - Se encogió de hombros - Los del fuego a veces son muy temperamentales cuando no les resultan las cosas en el primer intento y pueden llegar a ser unos idiotas hirientes si no se controlan.

Era verdad el hecho de que pudiese manipular los cuatro elementos, pero no dominarlos como cualquier adepto con su elemento definido y aunque ella paso por lo mismo no se sentía tan impaciente por tomar alguna decisión en ese momento. Siempre pensó que las cosas llegarían en el momento indicado y no habría presiones sobre el tema, porque la solución llegaría como un impulso en sus entrañas.

Vio como la bola de tierra se elevaba y se quedaba quieta unos momentos - Eso es verdad, pero es divertido mientras practicas - Miro la bolita de tierra e hizo un movimiento con los dedos de la mano derecha para separarlas en dos pequeñas esferas perfectas - Dominar el elemento lleva tiempo y hay que practicar - Abrió la palma de la mano para que las pequeñas esferas cayeran en ella e hizo que las bolitas se convirtieran en polvo que limpio dando un soplido a su mano, para poner atención nuevamente a lo que decía el muchacho a su lado - Las fusiones son interesantes - Puso nuevamente las manos en los bolsillos de su pantalón - A la clase de fusión de elementos sera nuestro destino entonces.

Era claro que ella podía manipular el elemento mucho mejor que yo, ante su fuerza en la tierra yo no podía hacer nada. Asentí sus palabras cuando habló de los adeptos del fuego -Es por eso que tampoco me puedo decidir por ellos, no encajo por más que el elemento me guste. me encogí de hombros.

Claro que había que practicar dominar los elementos, por eso leía tanto sobre ellos, pero si me decido solo por uno, los demás me parecerán una perdida de tiempo, o eso supongo, ya que en este momento me sirve saber de todo un poco. -Siempre me queda la opción de renunciar a mis poderes para obtener el conocimiento absoluto sobre el mismo. Aunque también estoy limitado a uno. Pero creo que eso es lo que va mas conmigo, quien te dice que sea el próximo sabio del templo. dije en forma irónica.

Sonreí a su respuesta positiva a la clase, me alegraba no tener que ir nuevamente a una clase solo. -Entonces apresurémonos. Tengo entendido que la Srita McKing no tolera las llegadas tardes. dije y perfilé hacia el salón en donde iba a ser la próxima clase.